Paul Zane Pilzer  ha sido comentador en innumerables radios y en la CNN. Apareció tres  veces en el programa televisivo Larry King Live y en las portadas de  muchas revistas internacionales. Dicta conferencias en vivo para  aproximadamente 500.000 personas al año y ha vendido más de 10 millones  de cassettes de sus conferencias.
Un  terremoto se avecina. De hecho, los temblores preliminares ya han  comenzado.
 Las bases de la economía tiemblan perceptiblemente; fisuras  zigzagueantes se delinean sobre las paredes de nuestros hábitos de  consumo; los cuadros pulcramente ordenados de nuestra realidad fiscal  están empezando a caerse de las paredes. Parece que va a ser uno de los  grandes 8.0 en la escala económica Richter o más y parece que sólo una  persona tiene los oídos suficientemente agudos para oír lo que se  avecina.
En  cada generación, entre los miles de comentadores sociales brillantes o  meramente lúcidos, la raza humana produce uno o dos visionarios cuyas  llamativas visiones rompen las barreras de su propia especialidad y  crean un nuevo atajo en todas las disciplinas. Nosotros tuvimos nuestros  Benjamín Franklins, nuestros Buckminster Fullers y a Paul Zane Pilzer,  el hombre que examina los desplazamientos sísmicos de nuestra economía.
Pilzer  es rápido en afirmar que él no tiene la bola de cristal: todo está en  los números. Pero el autor de tres best-sellers según el New York Times y  consejero económico de dos presidentes norteamericanos tiene un  sorprendente talento para reunir cantidades de hechos y números para  vislumbrar los bosques que estos árboles representan. Sus visiones  penetrantes han atraído la atención de los network marketers por más de  una década.
Ahora  está de vuelta, con un nuevo mensaje: estamos presenciando el  nacimiento explosivo de una nueva industria trillionaria , y los network  marketers están preparados para ser la vanguardia de dicha explosión.
Después  de dos siglos de oportunidad económica para los pioneros de la  manufactura, hemos entrado a la era de la distribución. Hoy, la mayor  oportunidad de riqueza aguarda a los que pueden entregar lo que Pilzer  llama distribución intelectual.
Está describiendo el network marketing. El está, como dice el dicho, cantando nuestra canción.
Fogg:  Paul, fuiste el primer economista reconocido que tuvo algo amable para  decir acerca del network marketing. ¿Qué es lo que te llamó la atención  en primer lugar?
Pilzer:  Creo que sería más correcto decir que el negocio me encontró a mí.  Empezó con mi libro de 1990, Unlimited Wealth que analizaba diferentes  sectores de nuestra economía y proyectaba algunos cambios interesantes  para el 2000.
En  los 70s y los 80s se nos ha dicho que lo que está mal en América es que  no fabricamos cosas. Entonces, los jóvenes brillantes de aquella era  comenzaron a fabricar cosas y lo hicieron tanto mejor que, transformando  las materias primas costosas y trabajo físico en plásticos y procesos  de manufactura flexibles automatizados, lograron reestructurar  completamente la economía de la comercialización al público.
Tomemos  un producto cualquiera de 300$ - digamos, un televisor, cámara, o  vestido. En los 60s, el costo de fabricación de este ítem hubiera sido  de 150$. Cerca del 50% del costo del ítem era manufactura, el otro 50%  era distribución.
En  los 90s, el mismo ítem todavía se vendía en 300$, pero era un producto  muy superior con muchas características mejoradas ¡sin embargo, su costo  de manufactura bajó de 150$ a 15$ o 20$! Ahora, el 80 - 85% del costo  del producto era la distribución solamente el 15 a 20% era manufactura.
Para  1990, como lo explico en Unlimited Wealth, las mayores oportunidades de  riqueza ya no estaban en la manufactura sino en la distribución. El  libro proyectaba que la tendencia continuaría por mínimo otra década.  Esta es la causa por la cual la gente más rica del mundo en los 90s era  gente que encontró mejores formas de distribuir las cosas, en vez de  mejores formas de fabricar las cosas.
F: ¿Podría darnos algunos ejemplos de estos más ricos del mundo que hicieron sus fortunas en distribución?
P:  Allá en 1961, Sam Walton comenzó una empresa comprometida a nunca  fabricar su propia marca, que sólo vendería bienes de otras marcas. Por  1990, WalMart era la mayor empresa de venta al público del mundo, Y Sam  Walton era el hombre más rico del mundo un hombre que amasó su fortuna  distribuyendo cosas que otras personas fabricaban. (Sam Walton, dicho  sea de paso, tenía una alta opinión de Unlimited Wealth y recomendaba  enfáticamente el libro.)
En  1990 Fred Smith fue el empresario de líneas aéreas más exitoso del  momento. Allá por 1976 comenzó una aerolínea con su propia flota de  aviones y pilotos sin embargo, no transportaba pasajeros! El único  propósito de Federal Express era mover paquetes: distribución un  concepto poco escuchado en 1976.
Ross  Perot fue uno del las personas más ricas del mundo en 1990. Perot  construyó una empresa de computación de 3.5 billones de dólares que no  producía ni hardware ni software. Qué es lo que EDS hacía? Distribuía el  hardware y el software de otras personas.
F: ¿Cómo llamaron sus observaciones sobre la riqueza y la distribución la atención de los network marketers?
P:  Hice tres programas televisivos en Larry King Live ese año. Estaba  explicando el libro en uno de esos programas; un hombre llamado Donald  Held estaba mirando. Don, un Diamante Ejecutivo Senior de Amway, le  mostró el programa a Dexter Yager. Dexter y un número de su gente  leyeron el libro y dijeron, Hey, esto es un análisis económico de porqué  nuestro negocio funciona. Este tipo no tiene ni idea de lo que es el  network marketing pero sí sabe porqué funciona!
Yo  realmente no tenía ni idea de lo que era Amway. Ni siquiera sabía lo  que era el network marketing. No estaba tratando de promocionar nada;  tal vez sea esa una razón por la cual mi investigación sonaba cierta.  Sólo estaba usando datos empíricos, analizando los sistemas de  distribución en América y el mundo.
La  gente de Dexter decidió contratarme como orador para que le explique a  sus distribuidores lo que yo había dicho en Larry King Live. Así es como  empezó.
F: Eso  fue hace más de una década, y usted se ha convertido desde entonces en  palabra familiar para los network marketers pensantes de todo el mundo.  Obviamente, su pensamiento no se quedó quieto; que ha pasado en estos  últimos diez años?
P:  He cambiado mi enfoque un montón. Allá en 1990, las oportunidades se  concentraban en la distribución física de productos; desde 1990  asistimos a un desplazamiento dramático. En mi nuevo libro, The Next  Trillion he separado la distribución en dos funciones: la física y la  intelectual.
Distribución  física significa hacer llegar el producto al consumidor productos que  el consumidor ya sabe que quiere. Eso es WalMart: cuando uno entra al  supermercado, escoge lo que necesita y sale del local. No se aprende  ningún concepto nuevo allí.
Distribución intelectual es donde usted aprende sobre un nuevo producto o servicio que usted antes no sabía que existía.
Hasta  1990, las grandes oportunidades de ganar fortunas en distribución, las  oportunidades para los Fred Smiths, Ross Perots y Sam Waltons estaban en  la distribución física. Hoy, las grandes oportunidades están en la  distribución intelectual.
F: ¿Por ejemplo...?
P: En  1999, un empresario fue el Hombre del Año de la revista Time, lo que  fue especialmente significativo porque es muy raro que un empresario  alcance tal distinción. Quién fue? Jeff Bezos, quien revolucionó la  distribución de libros con Amazon.com.
Miremos  más en detalle: Jeff Bezos realmente está en el negocio de la  distribución intelectual. Uno no usa Amazon.com sólo para obtener  físicamente un libro; uno lo usa para aprender acerca del libro. Puedes  leer varias reseñas, mirar otros libros de la misma categoría, hasta  puedes registrarte para averiguar cuando sale un nuevo libro acerca del  tema.
La  verdad es que gran parte del boom de la distribución física que  describí en Unlimited Wealth ya vino y se fue; las fortunas a hacerse en  el sector en gran medida ya se han hecho.
Las fortunas que se harán en el nuevo milenio al menos en la primera década del nuevo milenia estarán más en la distribución intelectual: educando a los consumidores acerca de productos y servicios que mejorarán sus vidas, productos y servicios que ellos aún no sabían que existían. 
F: ¿Porqué es allí dónde se encuentran las oportunidades reales hoy?
P:  Porque allí es precisamente donde está el mayor cuello de botella hoy.  Hubo un tiempo donde los dos aspectos de la distribución física e  intelectual estaban comúnmente combinados bajo el mismo techo. Hoy ya no  es más así.
Si  eres tan viejo como lo soy yo, podrás recordar las primeras pocas veces  que fuiste a una tienda y te dijiste, Hey, yo sé más acerca de este  producto que el empleado que lo vende! Veinticinco años atrás, esto era  un shock: quien pensaría siquiera en abrir un negocio en el cual el  empleado no sabía nada acerca del producto?
Hoy,  esto está universalmente aceptado. Hoy, se espera del consumidor que  conozca sobre el producto. Hay unos pocos vendedores al por menor  especializados, como Nordstrom´s. Pero en general, los vendedores han  abandonado completamente la función tradicional de enseñar a la gente  sobre los productos. En cambio, se han enfocado en la función de  entregar los productos en forma eficiente y barata.
Vaya  a un concesionario y hable con el vendedor de autos: esta persona  realmente posee el auto que a usted le interesa? No es probable. Vaya a  un local de electrónica: que tan frecuentemente encuentra usted un  vendedor que realmente es dueño del mismo artículo particular que usted  considera comprar o que puede apenas permitirse comprarlo? Muy rara vez.  Esta gente está en el negocio de mostrarle a usted en qué estante puede  encontrar el producto; ellos no están ahí para enseñarle a usted qué  es.
F: Entonces, ¿Dónde aprendemos hoy?
P:  Ése es el problema. El ritmo del cambio tecnológico está acelerando  rápidamente, no importa cuál sea la industria. En el tiempo que aprende  acerca de un producto y se decide a comprarlo adivine qué? Ya hay uno  mejor! ¿Dónde aprende uno sobre éste nuevo? En ninguna parte esto es lo  que falta, éste es el cuello de botella de nuestra economía. Hable con  cualquier fabricante y él le dirá: estamos vendiendo los modelos A, B, C  y D; el nuevo modelo, F, es siete veces mejor, hasta tiene mejor precio  pero nadie lo compra todavía! ¿Por qué no lo están comprando? Porque  todavía no aprendieron acerca de él. Ellos llaman a esto rezago  (backlog).
He  visto este fenómeno en un software educacional que desarrollamos a  principios de los 90s: aquí tenemos un gran producto que podría cambiar  totalmente la vida de un niño pero enterar a la gente acerca del mismo  era mucho más costoso que producirlo. Hasta que encontramos a Amway  Corporation a mediados de los 90s, estábamos estancados: teníamos  excelentes nuevos productos, pero sin manera de contarles a los  consumidores de su existencia.
F:  ¿Cómo se compara el estilo del network marketing contrastando con las  formas más convencionales de marketing publicidad y otros canales  masivos?
P:  El network marketing es hoy casi completamente distribución  intelectual. Cuando usted como network marketer debate un producto con  un cliente, muchas veces no entrega físicamente el mismo. Uno delega en  UPS o algún otro servicio de entrega para llevar el producto a su  consumidor.
Aún  más fascinante es que el network marketing hoy se hace cara-a-cara por  alguien que es también un usuario del producto. A diferencia del  vendedor de autos, vendedor de electrónicos, o vendedor de ropa, el  network marketer es un usuario educado, entusiasmado y experimentado del  producto que a usted le interesa.
Las  empresas que prosperan en el network marketing se enfocarán casi por  completo en la distribución intelectual, enseñándole a la gente acerca  de nuevos productos y servicios que mejorarán sus vidas. 
Las que realmente prosperarán son las que tengan tecnologías únicas o exclusivas. Y no sólo únicas, sino más eficaces que todas las demás.